viernes, 30 de diciembre de 2016

Un 2017 que debería ser un 3017


Disculpen no hay imágenes a mi texto)

Llegaremos a un 2017 cuando todas las predicciones eran para el 3017. Empezará la guerra por el agua; habrá luchas intestinas por tener el poco mineral que existe en la tierra; el poder político aminora, pero los que han vivido de nuestros impuestos no lo aceptaran y buscarán alternativas más violentas; los que se dicen políticos se quitarán el rostro y serán más violentos; Fidel Castro murió casi como lo planeó, y en Cuba no pasará los que muchos de Miami quieren, desde hace medio siglo; Marcos está enfermo –lo de Galeano, es un posol (así con s)sin cacao- o ya murió; el gobierno de Enrique Peña Nieto jamás fue gobierno, es más telenovela; y los partidos políticos nunca se dan cuenta que cuento toman un avió existe la anemoscopio en lenguaje técnico (calcetín del viento). El calcetín lo conocí y lo viví en el municipio chiapaneco de Las Margaritas. Fue una gran experiencia.

En fin, 2017 no habrá empleo, todo- cuando digo todo, es todo- subirá los precios y la violencia será la cotidianidad de nuestro país. Soy chiapaneco con orgullo, pero el muchachito que se dice gobernador está más cerca de un actor de la Guerra de las Galaxias que de conocer la guerra de Los Altos de Chiapas.

La tristeza se vuelve soledad en América Latina con todo un movimiento en contra de las causas indígenas, lo peor de causas justas compradas, el dinero imperará, lo peor es que será igual.

Con un mundo que se nos viene, es bueno desear feliz 2017.

Jubacu